Más info: Día Mundial de la Salud Mental

Según la OMS, en 2019, casi mil millones de personas –entre ellas un 14% de los adolescentes de todo el mundo– estaban afectadas por un trastorno mental.  Los suicidios representan más de una de cada 100 muertes y el 58% de ellos ocurrían antes de los 50 años de edad. Los trastornos mentales son la principal causa de discapacidad y son responsables de uno de cada seis años vividos con discapacidad. Las personas con trastornos mentales graves mueren de media de 10 a 20 años antes que la población general, la mayoría de las veces por enfermedades físicas prevenibles. Los abusos sexuales en la infancia y el acoso por intimidación son importantes causas de depresión. Las desigualdades sociales y económicas, las emergencias de salud pública, las guerras y las crisis climáticas se encuentran entre las amenazas estructurales para la salud mental presentes en todo el mundo. La depresión y la ansiedad aumentaron más de un 25% en el primer año de la pandemia solamente (en inglés).

Los 194 Estados Miembros de la OMS han suscrito el Plan de Acción Integral sobre Salud Mental 2013-2030 (en inglés), por el que se comprometen a lograr las metas mundiales para transformar la salud mental.

Mostremos ahora algunos datos de la realidad española, que reflejan esta mayor vulnerabilidad. En la última Encuesta Nacional de salud de España (ENSE) realizada en el 2017 sobre una muestra representativa de la población no institucionalizada residente en España se destacan los siguientes resultados referidos a salud mental:

• Un 10,8% de la población mayor de 15 años refirió haber sido diagnosticada de algún problema de salud mental.
• También se utilizó el cuestionario GHQ-12 para medir el riesgo de mala salud mental. 12,6% en el grupo de 15 a 24.
• El 10,7% de la población consume tranquilizantes, relajantes o pastillas para dormir y el 5,6% de la población de 15 y más años toma antidepresivos o estimulantes.
• Un 5,4% de la población refiere haber acudido al psicólogo, psicoterapeuta o psiquiatra en los últimos 12 meses.

Si consideramos el suicidio como un claro indicador de sufrimiento humano, las estadísticas también tienen que hacernos reflexionar y actuar para prevenirlos. Según el Instituto Nacional de Estadística (INE) se producen más de 11 suicidios al día en España.

El 19 de diciembre de 2023, el INE publica los datos definitivos del año 2022. Las conclusiones más importantes son:

Se registran 130 suicidios más que en los datos provisionales, lo que aumenta hasta un 5,6% las muertes por esta causa respecto a 2021.

Es la mayor cifra de suicidios registrada nunca en España, siendo el tercer año consecutivo en superarla. En el 2022 hubo 4227 suicidios (3126 hombres y 1101 mujeres)

Se registran también las mayores tasas de suicidio de la historia, tanto totales (8,85 muertes por 100.000 habitantes) como por sexos (13,34 en hombres y 4,52 en mujeres).

Si en 2021 preocupaba el alto número de suicidios infantiles (22 niños y niñas menores de 15 años se quitaron la vida, frente a los 13 de 2022), en 2022 llama la atención al aumento del suicidio adolescente (de 15 a 19 años), especialmente en varones: mientras que en 2021 se produjeron 53 suicidios (28 chicos y 25 chicas), en 2022 han sido 75 (44 chicos y 21 chicas).

También es preocupante el aumento de suicidios entre las mujeres más jóvenes (15 a 29 años): 79 en 2021 y 117 en 2022.

El suicidio sigue siendo, desde 2008, la principal causa de muerte externa en España.

Todo ello puede consultarse en el Informe del Observatorio del Suicidio en España 2022 de la Fundación Española para la Prevención del Suicidio: www.fsme.es

En el curso 2022/2023, el Ministerio de Universidades en colaboración con el Ministerio de Sanidad elaboró una encuesta (en 2 fases) para realizar un diagnóstico de la salud mental del estudiantado universitario en España.

Las encuestas se realizaron por vía online con la colaboración de las universidades. La tasa de respuesta global de la fase 1 equivale a más del 3,5% del total de estudiantes matriculados en el sistema universitario español y 1,4 % en la fase 2.

 Los resultados obtenidos son los siguientes:

En relación con las variables de salud mental, uno de cada dos estudiantes universitarios que contestaron la encuesta presentaba síntomas depresivos y de ansiedad moderada o grave en las últimas dos semanas. Es de destacar que, en las dos fases del estudio, las estudiantes de sexo femenino presentaron de forma significativa un mayor porcentaje de síntomas depresivos, ansiedad e insomnio clínico o grave y un porcentaje menor de consumo de riesgo de alcohol, comparadas con los estudiantes de sexo masculino.

En este estudio, la prevalencia de pensamientos suicidas durante las dos semanas previas es de uno de cada cinco estudiantes, aproximadamente.

En cuanto a los antecedentes de salud mental, es de destacar que, en ambas fases del estudio, el 17% de los estudiantes de la primera y segunda fase de la encuesta declaró que algún profesional médico le había prescrito tranquilizantes, ansiolíticos, antidepresivos o hipnóticos en el cuatrimestre anterior.

Más del 50% del estudiantado ha percibido la necesidad de apoyo psicológico por problemas de salud mental recientes durante el pasado cuatrimestre.

Más del 50% del estudiantado universitario ha consultado alguna vez con algún profesional sanitario por un problema de salud mental.

La Red Española de Universidades Promotoras de Salud (REUPS), en octubre de 2022, elaboró un documento de consenso sobre la salud y el bienestar emocional en las universidades. Posteriormente fue aprobado por el pleno de CRUE-Sostenibilidad celebrado el 18 de mayo de 2023 en la Universidad de Burgos.

La UC3M quiere dar un paso adelante en su compromiso por la promoción del bienestar emocional y la salud mental. La universidad en su conjunto y cada uno de los miembros de la comunidad universitaria puede y debe implicarse en la prevención y la promoción del bienestar emocional y salud mental de las personas que forman parte de la institución. De nada sirve formar a jóvenes muy preparados académicamente, si no nos preocupamos también de su desarrollo integral y de su bienestar emocional. La UC3M quiere contribuir a la felicidad de sus estudiantes, dotándolos de los recursos necesarios para hacerles más resilientes ante las adversidades de la vida. Sin una razonable salud mental, no es posible trabajar de manera productiva y contribuir con la sociedad. Creemos que ha llegado la hora de apostar decididamente por el cuidado de nuestra querida comunidad universitaria. Sabemos que la tarea no es fácil, pero estamos convencidos de que queremos hacerlo y que paso a paso lograremos una universidad más saludable mentalmente para todas y todos.