Pequeños gestos para ahorrar energía
Y no olvides que....
La temperatura ideal en una oficina en invierno, oscila entre los 19º y los 21º. Por lo que respecta al verano, la temperatura considerada confortable son 26 grados. Recuerda que por cada grado que subimos o bajemos el termostato, consumimos un 7 % más de energía.
Dejar abiertas puertas o ventanas cuando los sistemas de calefacción o aíre acondicionado están funcionando, es un derroche innecesario e inútil.
Ahorrarás, si apagas los sistemas de climatización cuando las salas están vacías. Enciéndelos sólo cuando alguien las utilice.